Aviñón

Situada en las colinas de Provenza, hay una de las ciudades más ricas de la historia de Francia: Aviñón. Todos lo conocen como la segunda Roma porque aquí los Papas tuvieron su residencia desde 1309 hasta 1377 y construyeron un hermoso palacio donde vivir con toda la corte de prelados, caballeros y damas.

Puente sobre el Rodano, en el fondo el campanario de la Catedral y las torres del Palacio de los Papas - Aviñón

En el momento de los papas y de su Palazio está conectada a la leyenda del pastor Benezet y de la construcción del puente sobre el Ródano, conocido como Puente de Saint Bénezet, un maravilloso puente de 1 kilómetro de largo con 22 arcos que, en gran parte, las inundaciones del río se han llevado; hoy solo quedan cuatro arcos suspendidos sobre el río.

Palais des Papes, XIV siglo – Aviñón

El palacio de los Papas es grande pero fue construido en tan sólo 20 años. Con sus 47 metros de altura dominaba toda la ciudad y no había ventanas a mitad de camino para evitar el ascenso de los muros: una verdadera ciudadela fortificada.
Al lado del Palacio de los Papas está la Catedral de Aviñón, una iglesia católica dedicada a Notre-Dame-des-Doms que en la cima del campanario tiene una estatua de la Virgen de 6 metros de altura que bendice a Aviñón; en el interior hay algunos frescos valiosos del pintor de Siena Simone Martini.
En Julio, el Palacio Papal y la cercana Plaza del Reloj, que toma su nombre a partir del reloj del Ayuntamiento, hospedan el Festival de Aviñón, con muchas representaciones de teatro, música y danza, exposiciones y reuniones.

Sandro Botticelli - Virgen y el Niño - Museo Petit-Palais - Aviñón

El Museo Petit-Palais merece una visita. Tiene una colección de pintores italianos primitivos entre que hay la Virgen de Botticelli, y ademàs el Museo Angladon que tiene una rica colección de impresionistas franceses.
No se pierda la visita al mercado cubierto de Les Halles, donde se pueden comprar las especialidades de Aviñón y, para los más curiosos, un paseo en la Rue des Teinturiers, también conocida como Rue de la Soie, porque esto era el camino de los tintoreros de seda. La calle es una de las más fascinantes de la ciudad: corre a lo largo del canal de Vaucluse donde hay molinos de agua y llega al Couvent des Cordeliers donde se encuentra la tumba de Laura, musa de Petrarca.

Rue des Teinturiers – Aviñón